Un total de 180 trabajadores del gobierno municipal de Puerto Vallarta pararon actividades en protesta por la falta de pago del bono Guadalupe-Reyes y otros reclamos laborales no atendidos.

El coordinador de gabinete, Salvador Llamas, calificó el acto como un atentado terrorista sin fundamento legal y disfrazado de huelga, ya que colocaron banderas rojinegras y bloquearon accesos a la presidencia municipal.

Como antecedente, la anterior administración municipal en Puerto Vallarta estuvo encabezada por el empresario Arturo Dávalos, representante de Movimiento Ciudadano, que dejó meses antes la alcaldía para buscar la diputación por ese distrito, que también perdió.

Acusa la actual administración que en las últimas semanas se dieron bases y se intentó sindicalizar a más de 200 trabajadores. “Sobre esto presentamos 219 juicios de nulidad, que nos han sido admitidos e incluso en la última audiencia nunca se presentó el personal del sindicato”.

Este jueves, sin embargo, se cumplieron los plazos impuestos por el sindicato que ya había parado en días pasados en protesta, por la falta de un bono tradicional que siempre se les entrega en enero, denominado Guadalupe-Reyes, pero que esta vez no llegó.

Colocaron banderas rojinegras en los ingresos a la presidencia municipal y al propio estacionamiento de la misma.

Se checó en las instalaciones de la Junta Laboral y se encontraron con que no hay reporte de huelga.

El Sindicato sostuvo que era un manifestación que se convirtió en paro laboral y las autoridades reconocieron que si se paralizó el municipio, pero que habrá que investigar lo sucedido a fondo.

Ambas partes acordaron instalar una mesa de diálogo la noche de este mismo jueves a fin de resolver el conflicto.