A diario, más en fines de semana, y en temporada vacacional, cientos y quizás miles de niños y niñas ayudan a completar el gasto de sus familias con la venta de artesanías, recuerdos o alimentos típicos de la región turística en los municipios costeros y de playa de Nayarit, contra esa práctica ilegal, que ya se hizo costumbre y se tolera por la sociedad y las autoridades, es la lucha que desde hace poco más de un lustro encabeza el presidente de la Asociación de Restaurantes de Bahía de Banderas, Mario Nasser.
En 2018 por entidad federativa, Nayarit alcanzó 19.7 por ciento como el estado con mayor tasa de trabajo infantil, mientras que el Módulo de Trabajo Infantil del Instituto Nacional de Estadística y Geografía registró que en México 11 por ciento de niñas y niños realiza alguna actividad laboral con o sin remuneración.
En entrevista para La Jornada, el dirigente de 244 restaurantes y negocios de alimentos y bebidas de la zona turística de los municipios de Bahía de Banderas, Compostela y San Blas, todos ubicados en la costa y playa nayarita, mostró la preocupación del gremio que representa respecto al serio y grave problema del empleo y trabajo infantil que pone en los primeros lugares nacionales a la entidad.
Explicó que en la zona de playa, principalmente en los restaurantes y negocios con giro de alimentos es posible ver a niñas, niños y adolescentes trabajando en actividades para el turismo, vendiendo artesanías, dulces y todo tipo de mercancías, en la mayoría de los casos lo hacen para apoyar a sus familias, situación que en algunos casos traen como consecuencia que haya casos en que menores de edad, llegan a ser víctimas de redes de explotación laboral, incluso sexual, de los que no se tiene registro oficial.
En respuesta a dicha problemática, tolerada por la sociedad y por las autoridades aunque va en contra de la ley, desde hace más de cinco años Mario Nasser se da a la tarea de concientizar a los propietarios de los negocios de alimentos para que no sólo prohíban el ingreso a sus negocios de vendedores menores de edad, sino que también se lleven a cabo acciones y programas con las autoridades para atacar las causa y evitar que los adultos, así sean sus familiares, les respeten sus derechos al estudio y a llevar una vida acorde a su niñez y adolescencia.
Indicó que la presencia del trabajo infantil en el noroeste de México es diversa y compleja, por esta razón, la creación de políticas públicas que respondan a las necesidades de niñas, niños y adolescentes ha sido difícil. Muchos y muchas trabajan desde temprana edad y en labores riesgosas con la complacencia de sus propias familias.
En tal sentido, urgió a las autoridades de los tres ámbitos construir políticas públicas diseñadas para prevenir y erradicar el trabajo infantil, enfocadas en atender las causas estructurales como pobreza, falta de acceso a servicios educativos, ausencia de trabajos decentes para sus padres, y carencia de servicios de cuidado infantil.
Nosotros, como empresarios de alimentos y bebidas para el turismo nacional y extranjero, nos enfocamos, en los hechos, puntualizó, en promover la creación de empleos dignos y bien pagados en la región para los padres y madres de familia, inclusive sin el apoyo oficial ni beneficios fiscales, «así contribuimos en ser parte de la solución a este serio problema, que de no atacarse de raíz, podría traer consecuencias tan graves para la niñez nayarita como la prostitución infantil que ya se vive en otras zonas turísticas del país», sentenció.
El pasado 13 de mayo, en la asamblea mensual de la Asociación de Restaurantes de Bahía de Banderas fue reelecto como presidente Mario Nasser por un periodo de tres años más, con lo que cumplirá 12 años al frente de esta organización que aglutina a un considerable número de negocios de alimentos y bebidas del municipio, así como de Compostela y San Blas.