Puerto Vallarta es una tierra de altos contrastes. Por un lado, están las muy buenas noticias, como ésta…

Y, por otro lado, las noticias que retratan al municipio desde sus entrañas, las que revelan la verdadera situación en materia de seguridad y depredación ambiental que atraviesa el que, pese a todo, se trata del punto neurálgico para el turismo en Jalisco.

Hoy, las noticias de balaceras, asesinatos, enfrentamientos y, más recientemente, el ataque a la comunicadora Susana Carreño, han cobrado factura entre la población de esa localidad.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en marzo pasado había 26.4 de cada 100 vallartenses con una percepción de inseguridad, pero esa cifra aumentó a 41 en sólo tres meses, según la más reciente Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, referente al segundo trimestre del año.

En las mediciones del Instituto, Vallarta es la localidad de Jalisco en donde más se incrementó la percepción negativa entre sus habitantes. Zapopan también registró un aumento en la percepción, pero aunque éste fue mínimo, pasó de 60.6 a 61.4 en sólo tres meses.

En los últimos años, Puerto Vallarta ha registrado múltiples eventos de alto impacto en materia de seguridad. Ahí fue donde asesinaron al ex gobernador en diciembre de 2020, ahí fue donde el empresario Felipe Tomé fue privado de la libertad y asesinado, y ahí es donde recientemente la Embajada y el Consulado de Estados Unidos emitieron una alerta de seguridad para que los habitantes de ese país tomen sus previsiones al viajar a ese destino turístico.

La encuesta del Inegi se levantó entre el 30 de mayo y el 15 de junio pasado, no sólo con el objetivo de levantar y registrar la percepción de la gente sobre la seguridad pública en su ciudad, sino:

“GENERAR INFORMACIÓN PARA LA TOMA DE DECISIONES DE POLÍTICA PÚBLICA EN MATERIA DE SEGURIDAD”.

El Inegi también revela que Guadalajara, Tonalá, Tlajomulco y Tlaquepaque registraron una disminución, pero en todos ellos, más de la mitad de los encuestados perciben un clima de inseguridad.

Y para no variar, los sitios donde más insegura se siente la gente son, en este orden:

  • Los cajeros automáticos.
  • El transporte público.
  • El banco.
  • Las calles que habitualmente utiliza.
  • Las carreteras.
  • El mercado.
  • Los parques recreativos.
  • Los centros comerciales.
  • El automóvil.
  • El trabajo.
  • La escuela.
  • El hogar.

Y también, para no variar, las mujeres son quienes perciben un clima más propenso para ser víctimas de un delito.