Antonio Cruces Mada, secretario de Salud de Jalisco del sexenio pasado, fue condenado a nueve años de prisión por un desvío de recurso de al menos 600 millones de pesos.

Además de la prisión, Antonio Cruces tendrá que pagar una multa de 5.8 millones de pesos que incluye la reparación de daños.

Cruces había sido vinculado en 2019 a un proceso de arresto domiciliario el cual violó y en abril de este año la Fiscalía Anticorrupción ya no le permitió regresar a casa por lo que fue detenido por seis meses.

Antonio fue un amigo cercano del gobernador Aristóteles Sandoval (2012-2018), priista que fue asesinado en 2020, quien lo mantuvo en el cargo pese a los señalamientos en su contra.

“Confío que la impartición de justicia actúe apegada a derecho y con un alto sentido de responsabilidad y se pueda saldar un asunto vergonzoso del pasado en nuestro estado”, agregó Enrique Alfaro, actual gobernador del estado de Jalisco.

El ex funcionario tenía trece carpetas de investigación abiertas en sí contra en la que incluían desvío y compra irregular en el equipo de video vigilancia y otros servicios de unidades hospitalarias.