Por: Santini Bracho/Puerto Vallarta
La iglesia de Nuestras Señora de Guadalupe fue construida por los vallartenses. No hubo arquitectos ni albañiles, fueron el esfuerzo, el trabajo, la dedicación y la fe de los habitantes de Puerto Vallarta los que dotaron de su iglesia al entonces pueblo de pescadores, hace ya 100 años, según relatan las personas de la tercera edad que aún viven, ya que cuando eran niños los llevaban a traer piedras del río y arena en baldes.
Un día antes del inicio de las actividades de celebración del centenario de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe el padre Esteban Salazar González, ahora párroco de la iglesia de la Santa Cruz, en la colonia Emiliano Zapata, recuerda pasajes de los 12 años que estuvo al frente de la parroquia ubicada sobre la calle Guadalupe Sánchez, fundador del entonces puerto Las Peñas, el 12 de diciembre de 1851.
MISA CONCELEBRADA
El padre Esteban Salazar participó en una misa concelebrada con los sacerdotes de las iglesias Del Refugio y San Rafael, quienes también fueron párrocos de la iglesia de Guadalupe.
Fue una misa especial, los tres agradecieron a Dios por la oportunidad de haber estado como párrocos de la iglesia de Guadalupe, por la celebración del centenario, que desde el 12 de octubre de 1921 recibió autorización para ser llamada parroquia.
GRANITO DE ARENA
El padre Esteban Salazar, quien fue párroco de la iglesia de Guadalupe durante 12 años (del 19 de enero de 2003 al 29 de agosto de 2014), explicó que la parroquia fue erigida hace ya 100 años, precisamente el 12 de octubre de 1921.
Con motivo de ese acontecimiento hizo una invitación a todos los sacerdotes que pertenecen a las distintas comunidades para sumarse a los festejos.
Curiosamente, las tres iglesias que se sumaron iniciaron sus trabajos religiosos desde hace 46 años, esas tres parroquias son la de la Santa Cruz, el Refugio y San Rafael, que fueron abiertas el 3 de mayo de 1975, cuando se hicieron parroquias y de ahí se fueron derivando más parroquias.
En las actividades en las que el padre Esteban puso su granito de arena para mejorar la iglesia de Guadalupe se encuentran la decoración con hoja de oro en los altares laterales y partes del arco del templo, entre otras áreas.
También está la restauración de la corona que remata la torre principal de la iglesia de Guadalupe, que se había caído en 1995 con el terremoto del 9 de octubre; el padre intervino para realizar la restauración y la mandó colocar nuevamente, la cual ha permanecido hasta ahora.
ATRACTIVO TURÍSTICO
Es así que es bien sabido que la santa patrona de Puerto Vallarta es la Virgen de Guadalupe. Es muy buen sabido también que los turistas llaman a esta iglesia la catedral de Puerto Valalrta, por la importancia que representa en México y el mundo, al ser el principal ícono turística del destino.
Sin embargo, se preguntó al padre por qué no es catedral, ante lo que el clérigo de la iglesia contesto: “Para que sea catedral tendría que declararse como diócesis de Vallarta y el obispo tendría que elegir ese templo como sede, “porque la catedral es la sede del obispo”, el templo sede del obispo es la diócesis y no puede haber más que una catedral y nosotros somos parte de la diócesis de Tepic, por eso la catedral está en Tepic”.
Y agregó: “El turismo llama a este templo la catedral por la importancia que representa, lo hermoso es lo histórico, la construcción, entre otras cosas de relevancia… y la representatividad que tiene ante el mundo entero”.
Cuando le preguntamos por qué la catedral está en otro estado, mencionó: “En la cuestión canónica se erige de distinta manera como es la situación civil para los estados, por eso no forzosamente tiene que coincidir. En las normas que hay para la jurisdicción, es la idea de comunicación, la capacidad para la sustentación del obispo del presbiterio”.
RECONOCIMIENTO
Cabe señalar que la celebración de la misa oficiada el pasado 11 de octubre fue un reconocimiento que “hacemos las parroquias de la Santa Cruz y la del Refugio a la parroquia de Guadalupe. Prevalece la gratitud a Dios, por la gente que con mucho cariño, mucha devoción, ha conservado la fe de la Iglesia Católica y la ha seguido comunicando a sus descendientes. Es el trabajo de tantos y tantos sacerdotes que han pasado por esta iglesia”.
El cura Rafael Pardo Castillo fue quien propiamente construyó el templo, estuvo como párroco, fue quien tuvo la visión de crear un templo así, de este nivel, y el privilegio de pensar que la torre fuera rematada con una corona, es algo especial que la distingue de las demás, incluso en el mundo.